natural

Definición:

Antónimos(s):

Ejemplo 1:

Y como los primeros fabricadores no tuviessen reglas para traçar, repartir y ordenar sus edificios, parecioles devían ymitar la composición del hombre, el qual fue criado y formado de natural proporción. (Sagredo, Medidas Romano, 1526, pág. 9).

Ejemplo 2:

Y ser salada la mar paresce que es contra su ser natural porque, pues la mar es origen y principio de las aguas y su propio lugar y las aguas que en ella se engendran y las que de los ríos entran son dulces, paresce que con más razón la mar avía de ser dulce que no salada. (Medina, Arte de navegar, 1545, fol. 12v).

Ejemplo 3:

El álamo, blanco y negro, y el saz y la tilia, que es la texa y el pimiento, por tener copia de fuego y ayre, y ser templados en la humedad y tener poco de tierra, comparados a templança liviana, tienen para el edificio una natural dureza, y como la terrestridad que tienen no los haga duros, por respecto de serraros son blandos y déxanse muy bien tratar de los esculptores. (Urrea, Vitruvio, Architectura, 1582, fol. 32r).

Definición:

Antónimos(s):

Ejemplo 1:

La borraz, o es natural, o artificial. La natural es una piedra luzia que se funde de manera de açúcar candi o de sal gemma, la qual sirve para soldar los plateros el oro y plata. La artificial se haze de alumbre de rocha y de sal armoniaco; sírvense d’él mucho los plateros. (Pérez Vargas, De re metallica, 1568, fol. 47r).

Ejemplo 2:

A nuestro estaño no le llamava Plinio sino plomo, y el que llamava estaño era en dos maneras, natural o artificial. El natural se sacava de piedra que tenía en sí plata y plomo, de la qual, puesta en el horno, lo primero que corría tomavan por estaño, de manera que no era otra cosa sino plomo, por naturaleza mezclado con plata. Después, lo que segunda vez con mayor fuego corría, era plata pura. Y el excremento crasso que d’esta segunda fundición quedava en el horno se llamava galena, y d’éste se sacava después sólo plomo. El estaño artificial se hazía de mezcla de dos partes de plomo blanco y una de cobre blanco, o de plomo blanco y negro iguales partes, o de dos partes de plomo negro y una de plomo blanco, y éste llamavan stannum tertiarium. (Valles, Tratado aguas destiladas, 1592, fols. 23v-24r).

Ejemplo 3:

Es el pissasphalto una como mezcla natural del asphalto y pez, y assí lo muestra su olor, y, a falta del verdadero, se contrahaze con ella. (Alonso Barba, Arte de los metales, 1640, fols. 8v-9r).

Definición:

Antónimos(s):

Ejemplo 1:

D’estas crecientes y menguantes de la mar, que de suso se han dicho, se notará que, aunque la cuenta d’ellas en tierra se puede enseñar, no se pueden ellas saber cómo vienen cada día si no es en la mar, porque allí se vee cómo y quándo la mar crece y mengua y quándo crece poco y quándo mucho, quándo la creciente es natural y quándo acidental. Digo que quando es natural, esto es según el curso de la Luna de su medio movimiento que cada mes haze. (Medina, Regimiento de navegación, 1563, fol. 54v).

Definición:

Antónimos(s):

Ejemplo 1:

A la primera notarse ha que este nombre Leste Oeste se toma en una de dos maneras; es a saber, natural y respectivo. (Medina, Arte de navegar, 1545, fol. 81r).

Definición:

Ejemplo 1:

Está con gran diligencia y atentamiento a entender la declaración d’este capítulo, porque son algunos nombres en especialmente que se ayuntan muy más prestamente por la manera de multiplicar, que no por la manera de sumar, la qual manera se llama progresión, que quiere dezir nazimento de cuenta. Y en esta progresión ay tres diferencias: la primera es natural, la segunda non natural, la tercera en parte natural y en parte non natural, como verás por los capítulos seguientes de adelante. (Ortega, Conpusición Arismética y Geometría, 1512, fol. 23r).

Ejemplo 2:

Para sumar qualquiera non natural brevemente, has de tener el mesmo aviso de la plática y enxemplo de las dos diferencias sobredichas de la progresión natural. Que quandoquiera que las figuras o sumas no fueren pares, que estonzes tomarás y multiplicarás todas quantas sumas fueren con el valor de la suma que estuviere en medio, y todo quanto saliere ponlo debaxo de todas las sumas, poniendo una raya entre medias y tanto montarán. Y si las sumas o renglones fueren pares, dexarás la suma postrera de abaxo y todas las otras sumas multiplicarás con el valor de la suma de en medio; y todo aquello que saliere por la multiplicación, ayúntanlo con la postrera suma de abaxo que te mandé que quitases y ponlo debaxo de todas las sumas. (Ortega, Conpusición Arismética y Geometría, 1512, fol. 24r).

Ejemplo 3:

Para sumar qualquiera suma que sea en parte natural y en parte non natural, agora sean las sumas pares o non pares, harás ni más ni menos que en las dos diferencias pasadas antes d’ésta de las sumas non naturales, y como lo veis por enxemplo. (Ortega, Conpusición Arismética y Geometría, 1512, fol. 24v).

Definición:

Sinónimos(s):

Ejemplo 1:

Quando no se fabrica bien el escaño o banco, o quando los maderos no se hazen bien, cosas en que se ponen los barriles de la pólvora dentro del hueco que llaman mina o hornillo de ella, y que se an de poner dentro del hornillo de manera que queden más altas que la boca de la mina y el techo o cielo lo más alto que se pudiere, porque, como el fuego de su natural pide subir a lo alto, hallándose de esta manera encerrado, más presto se aviará y ensanchará para arriva, y con mayor vigor empleará su potencia. (Lechuga, Discurso de la Artillería, 1611, pág. 269).

Ejemplo 2:

El viento en su natural mueve más presto a lo que es ligero que a lo grave y pessado, y a una bala pequeña sería forçoso al tiralla tenerse sobre viento quasi dos picas del baxel, por ser muy leve; y la grande, aún no una pica cabal. (Ufano, Tratado de la Artillería, 1613, pág. 213).

Ejemplo 3:

En ningún tiempo ni parte del mundo ha sido tan freqüentado el uso del açogue como en este nuestro siglo y provincia de las Indias [...]. Sácase de varios modos, aunque es uno el fundamento y principio de todos, que es su natural huir del fuego, convertido en vapor; que, encontrándose en cosa densa que lo detenga y refresque, toma su propia forma en que lo vemos. (Alonso Barba, Arte de los metales, 1640, fol. 97r).