doctrina

Definición:

Sinónimos(s):

Ejemplo 1:

Y, después, yo enseñaré el modo y manera de sumar, restar, multiplicar, partir, nonbres rotos o quebrados. Porque es razón que las cosas generales o causas, según la orden de la dotrina, todo tiempo se deben poner delante de aquellas que son menos generales. (Ortega, Conpusición Arismética y Geometría, 1512, fol. 43v).

Ejemplo 2:

Parescíame ver en alguna manera estar en ellas la costumbre de los antiguos, los quales, en sus maravillosas doctrinas, acostumbraron communicar y dar parte al pueblo de los preceptos de sabiduría y que pertenescían para bien y descansadamente bivir. (Sánchez de las Broças, Helt Frisio, Relox español, 1549, fol. 2r-2v).

Ejemplo 3:

En la terçera parte se trata del primor, doctrina y escuela que más necessaria es a la plática de los artilleros. (Ufano, Tratado de la Artillería, 1613, pág. 425).

Definición:

Sinónimos(s):

Antónimos(s):

Ejemplo 1:

A la sciencia llamavan dos, porque toda demostración y verdad que provar queremos ha de tener fundamento sobre otra cosa sabida y cierta, que los griegos llaman axioma, y la comprehensión de estas dos cosas se llama sciencia o doctrina. (Pérez de Moya, Arithmética práctica, 1562, pág. 444-445).

Ejemplo 2:

Los quales no fueron a los passados inferiores, pues el beneficio fue tal, que los unos con su fortaleza hizieron los cuerpos libres de servidumbre y los otros con su prudencia y doctrina purgaron las almas de ignorancia. (Pérez Vargas, De re metallica, 1568, fol. IIIv).

Ejemplo 3:

El astrólogo, para merecer este nombre y ser consumado en esta sciencia, deve de saber los libros XV de Euclides, la doctrina de triángulos planos y sphéricos de Monteregio y Menelao. (Herrera, Institución Academia, 1584, fol. 11r).

Definición:

Ejemplo 1:

Assí, los que carecieren de aquella sabiduría que nuestro Primer Padre pecando perdió, viendo cómo allí eredamos tanta rudeza en nuestros entendimientos, que todo lo que nos satisfaze o satisfazer puede con necessario trabajo se ha de adquirir, se aprovechen de una doctrina de Aristótiles que dize que, en defecto de naturaleza se ordenó el arte, para que abituándola suplamos las faltas d’ella, para continuación de la qual doctrina, juntamente con la primera regla de conocer por las formas de las especies, nos aprovecharemos de otra que nos enseña a conocer las cosas interiores por las exteriores, e las invisibles por las visibles. (Falero, Tratado del espera, 1535, fol. 2v).

Ejemplo 2:

Y que sea quantidad, de la doctrina del mismo Euclides se collige, porque en la postrera parte de la 16 proposición del tercer libro dize que el ángulo de la contingencia es menor que qualquier ángulo agudo rectilíneo, por pequeño que sea, y manifiesto es que lo que no es quantidad ny tiene quantidad, no tiene este appellido de mayor, o menor o ygual. (Núñez, Álgebra en Arithmética, 1567, fol. 68v).

Ejemplo 3:

Círculos parallelos se dirán en las cartas los que van de Levante a Poniente; y la mesma distancia que tienen entre sí al principio, tienen en todas las otras partes. Y puesto que los parallelos se pueden pintar a la voluntad de cada qual, empero, siguiendo la subtil doctrina de Ptolomeo y de los otros geógraphos, los assentamos sobre ciertos grados de latitud, como se puede ver en la figura que se sigue. Es menester que estén entre sí apartados, de tal manera, que el mayor día del siguiente parallelo tenga más una quarta de hora que el mayor día del precedente. D’esta mesma suerte será en todos los otros, assí hazia el Norte como hazia el Sur. (Apiano, Cosmographía, 1575, fol. 6r).