vacuo

Definición:

Sinónimos(s):

Antónimos(s):

Ejemplo 1:

Deves notar que Euclides toma impropriamente circumferencia por todo el semicírculo constante de área y circumferencia; y, assí, se ha de entender que el semicírculo con el área y circumferencia, traýdo a la redonda, causa sphera, porque, de otra manera, no se descriviría sino una superficie redonda, quedando vacua de dentro. Y de razón de la sphera es que sea sólida, porque de otra manera ya no descriviríamos sphera propria, sino una manera de orbe (Chaves, Sacrobosco, Sphera, 1545, fol. VIIIv).

Definición:

Sinónimos(s):

Ejemplo 1:

Si un número mayor fuere dividido por las casas vacuas que oviere entre él mismo y otro menor, si el quociente fuere duplo del menor, el mayor prende al menor (Pérez de Moya, Arithmética práctica, 1562, pág. 391).

Ejemplo 2:

Si un número fuere multiplicado por los spacios o casas vacuas que oviere entre él y la pyramis contraria, si la tal multiplicación fuere ygual a la máxima basis de la tal pyramis, prenderá el número a la pyramis (Pérez de Moya, Arithmética práctica, 1562, pág. 392).

Definición:

Sinónimos(s):

Ejemplo 1:

Han de conceder que se dé raridad y densidad en el cielo, para que con la densidad se hincha el vacuo y con la raridad dé lugar a que passe el ángulo, como el agua, que da lugar a que passe el pece. Y todas estas cosas son contra toda Philosophía natural y contra Aristóteles, en el quarto de los Phísicos, donde prueva ningún cuerpo estar sin lugar ni ningún lugar vazío; y en el segundo de Coelo, donde dize que el cielo es sólido y no puede darse en él raridad ni densidad . (Chaves, Sacrobosco, Sphera, 1545, fol.XXIr).

Ejemplo 2:

Suele naturaleza admittir un pequeño inconveniente porque después no se siga otro mayor, assí como es que por su naturaleza lo grave avía de descendir y no sólo no desciende, mas sube; y acontece descendir el fuego y subir el agua para hinchir el lugar vazío, por escusar que no se dé vacuo, el qual tanto aborrece. (Cortés de Albacar, Breve compendio sphera, 1556, fol. XIv).

Ejemplo 3:

La naturaleza, como está siempre intenta a la conservación de sí misma, dos cosas sobre todas aborreze y huye: la una es el vacío y la otra, la penetración de los cuerpos, las quales, si se diesen, destruirían la naturaleza, porque adonde ay vazío no ay natura y, passando un cuerpo en otro, se hallarían actualmente dos formas en una misma materia y cosa; y por huir estos inconvenientes suele ella romper sus leyes y costumbres y hazer que cosas pesadas suban a lo alto y las ligeras baxen a lo baxo, y assí, también, antes deja que los cuerpos se adelgacen y aprieten en menos espacio de lo que solían primero que permittir el vacuo o la penetración. (Lechuga, Discurso de la Artillería, 1611, pág. 169).