Diccionario de la Ciencia y de la Técnica del Renacimiento
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Variantes: secar.
( del lat. sĭccāre 'íd.' (DECH) ).

1. v. tr. u. t. c. prnl.

1ª datación del corpus: Pérez Vargas, De re metallica, 1568.
Marca diatécnica: Fil. Nat.,Metal.

Definición:

Extraer la humedad, o hacer que se evapore de un cuerpo mojado, mediante el aire o el calor que se le aplica (DLE).

Sinónimos(s):

desecar, disecar, enjugar, enjutar.

Antónimos(s):

enhumedecer, humedecer, mojar.

Ejemplo(s):

Ejemplo 1:

El açufre se purga y prepara d’esta manera: muélese y házese polvo, luego cueze en vinagre seys horas, y ha de ser el vinagre fuerte. Y, derramado el vinagre, se prepara el açufre, lavándolo con agua caliente, y lo que se assienta en el fondo del vaso se seca y enxuga. (Pérez Vargas, De re metallica, 1568, fol. 124v).

Ejemplo 2:

Si las balas havrá mucho tiempo que son hechas, son más peligrosas, por quanto se tornan mucho más prestas y repentinas, y esto porque se secan los olios con que estavan compuestas, que eran aquéllos que le davan temperamento y hazían lentas las mixturas. (Collado, Plática Artillería, 1592, fol. 85r).

Ejemplo 3:

Son muy más peores las aguas de aquellos lagos que en ellos no les entran ni fuentes ni arroyos ni ríos, mas sólo es agua de barrancos y de lluvias suzias. Y secando el sol aquellas partes que son subtiles, dexando aquellas partes gruessas, es necessario que ellas sean malas y muy ruynes. (Pseudo Juanelo Turriano, Veinte y un libros, ca. 1605, fol. 193v).


2. v. prnl.

1ª datación del corpus: Fernández de Enciso, Suma de Geographía, 1530.

Definición:

Dicho de un río, de una fuente o de algo similar: Quedarse sin agua. (DLE).

Ejemplo(s):

Ejemplo 1:

Vino la grande seca, que duró XXVI años que no llovió en España, y se secaron todos los ríos excepto Ebro e Guadalquivir, a do quedó alguna poca agua. (Fernández de Enciso, Suma de Geographía, 1530, fol. XXIVv).

Ejemplo 2:

El río Ana, que a par de la ciudad pasa, le veían que con las calmas del verano se venía a secar. (Lobato, Notas, ca. 1585, fol. 12).

Ejemplo 3:

Y ay otras aguas que son perpetuas, que jamás vienen a secarse aquellos ríos o fuentes que tienen menores o más pequeños vassos. (Pseudo Juanelo Turriano, Veinte y un libros, ca. 1605, fol. 2r).


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