raro

Definición:

Antónimos(s):

Ejemplo 1:

Pues que el fuego sea redondo pruévasse assí: toda cosa que es bien terminable y es contenida recibe la figura del continente. Pues el fuego es bien terminable, por ser muy raro, y es contenido del cóncavo del orbe de la Luna, como él allegue hasta ella, según se dize en el primero de los Metheoros , luego es terminado y recibe la figura del continente, que es el cielo, el qual, según avemos provado, es de figura sphérica. (Chaves, Sacrobosco, Sphera, 1545, fol. XXVIIIr).

Ejemplo 2:

Que los cuerpos, quan más densos son y espessados, más queman que quando son esparzidos y subtilizados, como el fuego elemental, que es diez vezes más raro qu’el ayre. (Micón, Diario grande cometa, 1578, pág. 42).

Ejemplo 3:

Otra razón hallo para que en los montes broten más fuentes que no en campos llanos, porque, como avemos dicho, los montes son porosos y tienen concavidades en las quales se engendran vientos, y éstos, por la virtud del sol, se van haziendo raros, lo qual es causa que no quepan en los lugares donde están y, procurando salir, rompen la tierra por donde hallan la parte d’ella más flaca (García de Céspedes, Instrumentos nuevos, 1606, fol. 27v).

Definición:

Ejemplo 1:

Demás d’esto, las aberturas, unas son quando estuvieren espessas las columnas, y otras quando raras, porque sobre las columnas espessas se pone viga, y sobre las raras arco. (Loçano, Alberto, Architectura, 1582, pág. 30).

Ejemplo 2:

Ay un cierto género de encolumnar quando se assientan raras y un poco distantes entre sí; otro, quando se ponen muy allegadas y unas muy vezinas a otras. Porque en las muy raras, por causa de las anchuras de los intervalos, si usáys de architrave, rómpese; si de arco, no se pone harto cómmodamente en columnas. (Loçano, Alberto, Architectura, 1582, pág. 199).

Ejemplo 3:

Las differencias de templos o casas son cinco, de los quales son éstos sus nombres: pychnóstilos, que quiere dezir ‘columnas continuadas y espessas’; sýstylos, poco menos o poco más apartadas; dyástylos, puestas más anchas y más apartadas; areóstylos, más raras que conviene entre sí, guiados los espacios de los entrecolumnios. (Urrea , Vitruvio, Architectura, 1582, fol. 38v).