encuentro

Definición:

Sinónimos(s):

Ejemplo 1:

Porque a los primeros encuentros no pelean sino las diez hileras primeras y, si aquéllas se rompen, es roto el exército, porque siempre se ha visto, rompidas las primeras hileras, ser roto el exército. (Montes, Instrucción y regimiento, 1537, fol. XIIIr).

Ejemplo 2:

Y tenga recato el capitán en no dar parte a alguno [...], por el peligro que ay de que, sabiéndolo el enemigo de algunas espías que para esto tenga puestas de los suyos, o de la gente del mesmo campo, como muchas vezes sucede, no se fortifique en algún passo peligroso y haga estrago en los que caminan descuydados d’este encuentro y acometimiento. (Álaba, Perfeto capitán, 1590, fol. 44r).

Ejemplo 3:

Y aunque es verdad que ha avido algunos authores que an escrito sobre el usso y manejo del artillería y cosas tocantes d’él, no a sido con la particularidad y esperiençia que Vuestra Merced, pues es claro que se tiene mucha mayor ahora que en el tiempo que los otros authores escrivieron, por las continuas guerras que ha avido después acá, particularmente en estos estados, donde se ha ofreçido tantas veces campear con nuestros exérçitos al opósito de los del enemigo, donde ha avido muchas escaramuças, enqüentros y batallas, sitios de plaças y ser sitiados en ellas. (Ufano, Tratado de la Artillería, 1613, pág. XIII).

Definición:

Sinónimos(s):

Ejemplo 1:

Tomaremos la líneas g.m. y m.n. yguales a b.c. y c.g., y llevaremos de los puntos m.n. líneas equidistantes a la línea a.g., que sean m.o. y n.p., cuyos encuentros con las líneas b.l. y c.k. son en los puntos q.r.s. y t., y quedará por esta arte la disposición de la figura de que usamos. (Núñez, Álgebra en Arithmética, 1567, fol. 143v).

Ejemplo 2:

Y del punto l. llevaremos línea recta que haga con a.l. en ese punto l. ángulo recto en el plano del mismo triángulo, y estenderemos la línea a.d. hasta que se encuentre con la que va del punto l. y es perpendicular sobre a.l., y sea este encuentro en m., y de m. para k. llevaremos línea recta. (Núñez, Álgebra en Arithmética, 1567, fol. 253r).

Ejemplo 3:

Óvalo es una figura contenida de una línea circular, sin principio, ni fin ni centro. Su formación general es con quatro puntos, que se dan de esta manera: házense dos círculos, que el uno llegue al centro del otro, y los dos centros 1.2, y los encuentros de los círculos 3.4 serán sus centros. (Arphe, Varia Commensuración, 1585-87, I, fol. 9v).

Definición:

Ejemplo 1:

De las calles más principales de las ciudades, y cómo se adornan las puertas, puertos, puentes, arcos, encuentros de calles y plaças (Loçano, Alberto, Architectura, 1582, pág. 247).

Ejemplo 2:

Pero a lo que a las plaças y encuentros de calles más principalmente adorna son los arcos puestos en las entradas de las calles, porque el arco es como una puerta siempre abierta. (Loçano, Alberto, Architectura, 1582, pág. 250).

Ejemplo 3:

Paréceme aver acabado casi todas las cosas que pertenecían para adornar las cosas públicas. Diximos las sagradas, diximos las prophanas, diximos los templos, portal, basílicas, monumentos, caminos, puertos, encuentros de calles, plaças, puente, arco, theatros, arcos, corros, curias, assientos, passeaderos y las otras cosas tales, de suerte que ninguna cosa resta en que tratemos, sino los baños. (Loçano, Alberto, Architectura, 1582, pág. 265).

Definición:

Ejemplo 1:

Las pilas haranse a modo de naos, que tienen su proa y popa.[...] La proa ha de tener su ángulo otuso y lo mesmo la popa, y en ninguna manera se hagan acutos, porque se rompen con los encuentros que les dan las cosas que trahen los ríos con las cresçidas. (Pseudo Juanelo Turriano, Veinte y un libros, ca. 1605, fol. 367v).

Ejemplo 2:

Hay otras pilas hechas de otra manera, que no tienen ángulos a los cabos, pero estas pilas tienen dos medios redondos a los dos cabos, los quales son muy seguros para resistir a qualquier encuentro o golpe que en ellos hiriere; antes bien, que la fuerça de la agua les va fortificando, por causa de la forma çircular. (Pseudo Juanelo Turriano, Veinte y un libros, ca. 1605, fol. 367v).

Ejemplo 3:

La figura A tiene su B, que es su ángulo, hazia la mar, el qual ángulo es el que reçibe los encuentros de las holas, en tal modo, que les vienen a herir. (Pseudo Juanelo Turriano, Veinte y un libros, ca. 1605, fol. 408v).

Definición:

Ejemplo 1:

Y en los tales cassos me a sucedido mandar descubrir al enfermo y dexarle sola una sávana y tomar otra, y poner a los enqüentros de la cama quatro personas para que con ella le hiziessen ayre, aviéndole aplicado lo dicho, y con esto he visto buenos efectos y jamás vi suceder daño de lo dicho. (Sanctiago, Arte separatoria, 1598, fol. 148v).

Ejemplo 2:

Éste es el segundo modo de açute de piedra seca, que es a modo de una escala de dos subidas, la una por una parte y la otra por frente de éssa, que es P, de cara N. Y el agua viene por la parte M. [...] Y si se cortare todas las esquinas de las piedras que se levantan para arriba, tanto más firme será este açute, por causa que el agua no hallará en qué topar para que haga alguna fuerça en lo que topare, antes bien, que muy mejor yrá resvalando para arriba que no haría hallando aquel enqüentro que tiene cada piedra para arriba, que es donde está la O. (Pseudo Juanelo Turriano, Veinte y un libros, ca. 1605, fol. 163v).

Ejemplo 3:

Como en las minas se anda de ordinario a gatas y arrastrando, y otras veces estribando con brazos y piernas, hay necesidad de guarnecerlo todo [...] En los encuentros de los hombros guarnecen también las camisetas con algunos pellejos para el mismo efecto. (Llanos, Diccionario minas, ca. 1609-11, pág. 75).

Definición:

Ejemplo 1:

Para intelligentia de lo que hablamos, haremos una demonstratión para que mejor se entienda. Haranse unas paredes, donde herirán las holas, que sean muy gruessas y firmes para que puedan mejor resistir. Y estas paredes que están al encuentro de la mar han de estar todas lamboradas, o hechas a modo de barbacana, o lamboradas, o de bislay, de manera que no hallen las holas cosa en qué topar. Y si ellas se hizieren en línea conversa, serán mucho mejores que en ninguna otra forma. (Pseudo Juanelo Turriano, Veinte y un libros, ca. 1605, fol. 394r).

Ejemplo 2:

Pongamos por caso que la pared A es aquélla que está hazia la mar, puesta al encuentro de las holas. Y lo alto de la pared es B. El fundamento es la C, el qual ha de ser de muy fortíssima materia y mucha. Hase [de] empeçar el fundamento en redondo, como lo muestra la letra D, de modo que las holas no tienen dónde topar, porque la línea de la pared A, la qual haze un ochavo de redondo, por donde no hai lugar donde poder herir de golpe de ninguna parte, por no haver en qué topar. (Pseudo Juanelo Turriano, Veinte y un libros, ca. 1605, fol. 394v).

Ejemplo 3:

De modo que el monte ha de estar dentro de la mar y que la orilla de la mar esté paralella con el pie del monte. El monte M es al encuentro de la mar, y sus riberas N O. Y d’este modo, que en este lugar correrán las holas dende la M hazia la N y la O, que es la otra parte oppósita de N. De modo que, desde la M, que es la punta del monte, hasta la O, que es el cabo del monte, donde empieça la orilla y corre hazia P, y lo mismo haze hasta la T dende la N. (Pseudo Juanelo Turriano, Veinte y un libros, ca. 1605, fol. 396r).