Diccionario de la Ciencia y de la Técnica del Renacimiento
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Variantes: astrolabio, estrolavio.
( tomado del lat. med. astrolabium (Du Cange), y éste del gr. ἀστρολάβος (Liddell-Scott) ).

1. sust. m.

1ª datación del corpus: Fernández de Enciso, Suma de Geographía, 1530.
Marca diatécnica: Astr.

Definición:

Instrumento con forma de disco plano para medir longitudes, latitudes y la altura de las estrellas.

Ejemplo(s):

Ejemplo 1:

Esto lo pongo aquí porque es menester saberlo para tomar el altura del Sol con el astrolabio e quadrante como adelante se dirá en lo de la declinación del Sol y en su regimiento. (Fernández de Enciso, Suma de Geographía, 1530, fol. VIIIr).

Ejemplo 2:

Tómese un astrolabio en una noche serena y clara y mírese por las dos pínnulas qué altura tenga el polo en un tal lugar, y nótense los grados que el mediclinio, o línea fiducie, señalare en el limbo sobre la línea horizontal. (Chaves, Sacrobosco, Sphera, 1545, fol. XXXVr).

Ejemplo 3:

El astrolabio se haze en esta manera: en el medio de una tabla redonda, que sea de metal o madera y por todas partes igual y del gruesso de un dedo, se tomará un punto A, en el qual, puesta la una punta del compás con la otra se señalará un círculo, el mayor que pudiere recebir la dicha tabla. Y dentro de este círculo se señalarán otros dos, que el segundo diste del primero por el ancho de un grano de trigo, y el tercero diste del segundo el doble que el segundo del primero. (Çamorano, Compendio arte de navegar, 1588, fol. 13r ).

Información enciclopédica:

“El astrolabio es el instrumento más importante de la astronomía antigua […]. Introducido en Occidente ante del año mil, […] tuvo una influencia innegable en las épocas posteriores. […] En los medios escolares, alrededor del astrolabio, se desarrolló toda una enseñanza de la geometría práctica que fue la común y única para toda la Edad Media […]. El astrolabio planisférico tiene forma circular, con un diámetro que oscila entre los diez y los cuarenta centímetros y un grosor de pocos milímetros. […] Se utilizó durante varios siglos para resolver diferentes problemas: hallar la posición de cualquier astro en relación a la tierra, representar la rotación diaria de la bóveda celeste y calcular diferentes medidas de distancias. […] El armazón del astrolabio se denomina madre y en la parte superior lleva una anilla para poder colgarlo. Las dos caras se llaman faz y dorso. En la faz lleva la araña, que en pocas palabras podríamos decir que es un mapa del cielo, y el tímpano, un mapa de la tierra, con círculos concéntricos que son las proyecciones estereográficas de los Trópicos y el Ecuador terrestre. […] La corona circular se llama limbo y lleva anotadas, generalmente, las cifras de las horas y una graduación de 0 a 360º.” (Mª. I. Vicente Maroto y M. Esteban Piñeiro: Aspectos de la ciencia aplicada en el España del Siglo de Oro, Salamanca, Junta de Castilla y León, 1991, págs. 247-251).

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