armar

Definición:

Ejemplo 1:

La otra mitad la repartirá en dos esquadras y les dará cabeça que los rija, y los armará con peto y morrión, espada, daga y rodela, y pistoletes (si los uviere). (García de Palacio, Instrución náuthica, 1587, fol. 124v).

Ejemplo 2:

Los oficiales del exército se han de armar d’esta suerte: el capitán, si fuere su compañía de arcabuzeros, llevará su arcabuz, y si de piqueros, su pica y un muy buen coselete, para que sus soldados le imiten. Las mesmas armas llevará el maestre de campo; el alférez llevará un coselete y celada, y su espada y daga; el sargento se armará de una coracina, camisa de malla o cuera de ante y de una alabarda, y no de armas más pesadas, por el peligro que tiene de cansarse, a causa de traer este oficio consigo un continuo movimiento. (Álaba, Perfeto capitán, 1590, fol. 130v).

Ejemplo 3:

Las tres diferencias de gente de a cavallo que comúnmente se usan: hombres de armas, estradiotes y cavallos lijeros, se devrían armar d’esta suerte: los hombres de armas lleven grevas enteras, quijotes, peto con faldas, gorguerín, almete con sus baveras, manoplas, braçales, gocetes y grandes pieças: espada de armas y el estoque a un lado del arzón, y la maça, al otro. La lança que llevaren sea gruessa y larga. Los cavallos lijeros llevarán una celada, un coselete, medios quijotes hasta la rodilla, manoplas, braçales y grandes espaldillas; y la celada sea bien cubierta, la vista quebrada o abierta; una espada ancha, una maça al arzón y una lança larga. Los estradiotes se armarán de la mesma manera que los cavallos lijeros, si no son los braços, porque, en lugar de braçales y manoplas traerán mangas y guantes de malla. (Álaba, Perfeto capitán, 1590, fol. 130v).

Definición:

Ejemplo 1:

Algunos han querido dar leyes y dezir cómo se deven armar los esquadrones, repartiendo entre tales picas tantos arcabuzes, más o menos según su albedrío, como si la ordinata en los enemigos fuesse siempre de una forma, mas, pues no lo es, será conviniente que el cómo se han de armar se dexe a la dispusición del diestro capitán, que, aviendo reconoscido y sabido las armas y ordenança del enemigo, arme y componga los suyos como mejor puedan defenderse y offendelle (García de Palacio, Diálogos militares, 1583, fol. 55v ).

Ejemplo 2:

Y común opinión es que las hileras que han de calar primero lleven las picas quatro o cinco palmos más largas que las otras, y que d’estas picas tales huviesse para armar la décima parte de los piqueros que huviesse en el exército, con que se guarneciessen a lo menos los lugares más necessarios, porque es muy gran ventaja ser una pica más larga que otra. (García de Palacio, Diálogos militares, 1583, fol. 189v).

Ejemplo 3:

Una armería en que aya tantos arcabuzes, mosquetes, cossoletes y picas como son menester a la gente que se a dicho a de tener en tiempo de sitio, y más, por los que se rompieren durante un sitio. Y esto de manera que, queriendo tomen todos armas de fuego hasta que se llega a las manos, se pueda hazer; y finalmente, tantas que basten a lo dicho y a poder armar la gente que se entrare en la fuerza, que guardare lugar, villa o ciudad en repentinos acaecimientos, alborotos y traiciones. (Lechuga, Discurso de la Artillería, 1611, pág. 265).

Definición:

Ejemplo 1:

Fíase de su persona la compra de metal para la artillería y de todas las cosas necessarias a ella y a armar un exército, y quanto es menester de máchinas aviendo de campear y de tomar tierras o fuerzas. (Lechuga, Discurso de la Artillería, 1611, pág. 229).

Definición:

Ejemplo 1:

La primera, junto a las primeras órdenes de picas, yendo en cada orden dos arcabuzeros, para que, mientras arma o carga el uno, tire el otro. (García de Palacio, Diálogos militares, 1583, fol. 167v).

Definición:

Ejemplo 1:

Juntamente se da orden a cada capitán en la manera que ha de armar su navío, ofreciéndose combatir, y lo ha de executar con puntualidad. (Mendoça, Theórica y práctica, 1596, pág. 162).

Ejemplo 2:

Yva en esta Real Armada, en un galeón que se acabó de armar en el río de Lisboa de que he hecho mención, don Pedro de Toledo, Marqués de Villafranca, hijo del famoso don García de Toledo, Capitán General de la mar. (Mosquera, Comentario disciplina militar, 1596, fol. 16v).

Ejemplo 3:

Ya que nos hemos metido en armar estos navíos, justo será que se tripulen de gente de mar y guerra. Vuestra Merced lo haga según y de la manera que se acostumbra en la Armada del Océano. (Anónimo, Diálogo fábrica de navíos, ca. 1631, fol. 20v).

Definición:

Ejemplo 1:

Concertavan y armavan los antiguos las molduras de la cornixa sobre el rostro del hombre, poniendo cinco quadros en cinco lugares del dicho rostro: el primero sobre la frente, el II sobre los ojos, el III por las narizes, el IV sobre la boca, el V so la barva. (Sagredo, Medidas Romano, 1526, pág. 19-20).

Ejemplo 2:

En el qual se demuestra en qué manera se armará una barca para llevar por los ríos artillería sobre ella. (Collado, Plática Artillería, 1592, fol 92r).

Ejemplo 3:

Y ansí se van armando de pieza en pieza. Y para armar esta puente no es menester barcos, que con solas [las] mismas piezas se pueden armar, que con unas cuerdas que la vaya detiniendo. (Pseudo Juanelo Turriano, Veinte y un libros, ca. 1605, fol. 209r).

Definición:

Ejemplo 1:

Los mineros, para el conocimiento y distinción de las piedras sobre que arman o se crían los metales, tienen sus nombres de que usan entre sí ordinariamente. (Alonso Barba, Arte de los metales, 1640, fol. 12r).

Ejemplo 2:

Llaman quijos a las piedras de casta de guijarros que participan de oro, o plata, o otro metal qualquiera y son de mayor duración y fundamento las vetas que sobre aquesto arman. (Alonso Barba, Arte de los metales, 1640, fol. 12r).

Ejemplo 3:

Si el metal arma sobre quixo y en algunos huecos se hallan granillos como de pólvora, que es el que llaman plomo, siendo plata bruta, aunque esto sea muy poco y lo demás no tenga ley, es señal de riqueza en llegando a la humedad. (Alonso Barba, Arte de los metales, 1640, fol. 25v).

Definición:

Ejemplo 1:

Y para el ángulo que encaxa de la barbilla en el estribo, como pase de las dos colas del quadrado una pulgada, basta que, como son diferentes armares, causan diferentes ángulos en aquella parte. (López de Arenas, Reglas de la carpintería, 1619, fol. 21v).

Ejemplo 2:

Podrás, subiéndole la calle de lazo del almarbate, otra calle que dará con más suabe armar, y no pareserá el harneruelo tan subido. (López de Arenas, Reglas de la carpintería, 1619, fol. 25r).

Ejemplo 3:

Y aunque queden las dos últimas péndolas más serradas que la calle, no ynportará, a fin de dalle buen armar, que todo será reduzir sus gruesos a piesa más angosta. (López de Arenas, Reglas de la carpintería, 1619, fol. 25r).