Diccionario de la Ciencia y de la Técnica del Renacimiento
<< Volver

( tomado del lat. spĕcŭlātĭō, -ōnis 'contemplación, especulación' (DECH) ).

1. sust. f.

1ª datación del corpus: Sagredo, Medidas Romano, 1526.
Marca diatécnica: Metod.

Definición:

Contemplación grande y aplicación del entendimiento para saber y conocer las cosas. (Autoridades).

Ejemplo(s):

Ejemplo 1:

No se acuerdan de los tristes escriptores que, escriviendo [...] las cosas que convienen a la governación e utilidad de la república, consumen su vida, gastan su sentido, agénanse de plazeres, y con sus continuas especulaciones e profundos pensamientos atraen la vejez y acarrean la muerte antes de tiempo. (Sagredo, Medidas Romano, 1526, pág. 2).

Ejemplo 2:

Y quanto a la especulación, tienen éstas (reglas) este primor: que la su demonstración, siendo todo en números, se puede fundar en los principios de la Arithmética, la qual pone que los números son compuestos de unidades indivisibles. (Núñez, Álgebra en Arithmética, 1567, fol. 140v).

Ejemplo 3:

De modo que el exemplo de la una demostración verifica el otro, y el otro al otro. Quiriendo tomar en ello una poca de especulaçión, vendrá a verificarse esta materia. Y esto he querido demostrar antes de enseñar el modo como se a de hazer esta envención. (Pseudo Juanelo Turriano, Veinte y un libros, ca. 1605, fol. 122v).


2. sust. f.

1ª datación del corpus: Ufano, Tratado de la Artillería, 1613.
Marca diatécnica: Mil.

Definición:

Conocimiento de los enemigos obtenido con secreto y disimulo.

Ejemplo(s):

Ejemplo 1:

Quando se va a sitiar una plaça por maravilla se hallará ningún general del artillería, por vía d'espías y especuladores, no tenga bien entendido si dentro d'ella el enemigo [.] tiene bastantes muniçiones o penuria, [.] quántos valuartes, reparos y bestiones, minas o contraminas [.]. Porque, [.] según lo que por buena ynformaçión y expeculaçión uviere reconosçido, deve el sagaz general aperçebir sus ynstrumentos y materiales para abrirle sus trincheas y fossos. (Ufano, Tratado de la Artillería, 1613, pág. 120).


<< Volver