Diccionario de la Ciencia y de la Técnica del Renacimiento
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Variantes: rebelde, revelde.
( tomado del lat. rebĕllis 'íd.' (DECH) ).
Familia léxica: rebelado, rebelar, rebelión.

1. adj. u. t. c. sust.

1ª datación del corpus: Montes, Instrucción y regimiento, 1537.
Marca diatécnica: Mil.

Definición:

Que, faltando a la obediencia debida, se subleva (DRAE 2001).

Ejemplo(s):

Ejemplo 1:

E si, por caso, las otras tierras hizieren lo mismo y fueren rebeldes, hágase en ellos el mismo castigo, porque la guerra hase de hazer con daño de los enemigos y de todos aquéllos que siguen su opinión, y no a provecho suyo. (Montes, Instrucción y regimiento, 1537, fol. VIr).

Ejemplo 2:

Esta pregunta será occasión para que este punto quede más declarado, a la qual respondo, señor, que levantar exército para yr a resistir al enemigo que entra por el reyno, o para yr a castigar a los rebeldes que se han levantado con parte de la provincia, o para entrar por las tierras del enemigo a offenderle es propria del príncipe. (García de Palacio, Diálogos militares, 1583, fol. 15r).

Ejemplo 3:

En la villa de Santander, quando don Fadrique de Toledo Osorio arribó a aquel puerto, el año de 1628, del viaje que hizo con la armada a Mormian, y contra la armada ynglesa que estava dando ayuda a aquella ciudad revelde a su rey, se levantó una enfermedad tan grande que murió cantidad de gente. (Anónimo, Diálogo fábrica de navíos, ca. 1631, fol. 45r).


2. adj.

1ª datación del corpus: Alonso Barba, Arte de los metales, 1640.
Marca diatécnica: Metal.

Definición:

Dicho de un metal: lento en su fundición y difícil de beneficiar.

Antónimos(s):

obediente.

Ejemplo(s):

Ejemplo 1:

No es cosa muy extraordinaria, sino, antes, común, el criarse hierro junto con el oro y la plata en los metales. Los que d'él participan son los más rebeldes en la quema y los más dificultosos en la fundición. (Alonso Barba, Arte de los metales, 1640, fol. 45v).

Ejemplo 2:

Házense [...] composiciones varias para facilitar la fundición en metales muy duros y rebeldes, que más son de curiosidad para en ensayes menores que de provecho, por su costa para fundiciones grandes. (Alonso Barba, Arte de los metales, 1640, fol. 86r).

Ejemplo 3:

Si el metal fuere demasiadamente rebelde, se le añada un poco de sal común, muy bien quemada antes, con que se facilitará la fundición y despedirá mejor la escoria. (Alonso Barba, Arte de los metales, 1640, fol. 88v).


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